Una
vez finalizado el torneo podemos hacer un breve resumen de cómo le ha ido el
torneo a nuestro equipo en el torneo absoluto de Álava. El objetivo de este
equipo era jugar, se hicieron tres equipos para que cada sábado más martintxos pudiesen disfrutar del
ajedrez. Además… si se podía, queríamos dar alguna sorpresa a los que nos
subestimasen.
El equipo era largo, pero no todos con la misma
disponibilidad, pero como no nos gusta tener que presentarnos con mesas vacías,
esa era la mejor opción. El equipo estaba encabezado por Maxim Antipov, nuestro ruso para intimidar que este año no pudo meter
miedo a nadie ya que por diversos motivos se le hizo imposible disputar ni una
sola partida.
Le seguía Ander
Salgado, nuestro jugador fijo, al que solo dejamos descansar una única
ronda. Es normal que no quisiésemos prescindir de él, ya que de primer tablero
nos hizo ni más ni menos que el 50% de los puntos. Un luchador sin duda, y sin
miedo a nadie. ¡Eres enorme!
Javier Indart tampoco se asusta fácilmente y jugó un par de
partidas. No logró puntuar pero quien no juega desde luego no gana. ¡Poco a
poco!
Varios de nuestros nuevos fichajes y jóvenes promesas
debutaron en un torneo absoluto por primera en esta ocasión. Este fue el caso
por ejemplo de Oier Arenzana. Otro
valiente luchador del equipo que no se asusta con nada y demuestra cada partida
que quiere seguir aprendiendo. Además, logró unas tablas de segundo tablero.
¡Buen trabajo!
Nuestro pequeñito pero matón Martín Guerra también tuvo sus partidas en este torneo.
Lamentablemente le tocaron rivales duros y no pudo puntuar. Recuerda: todo
llega para el que no se rinde. ¡No dejes de luchar cada partida!
Otro de nuestros indispensables por disponibilidad fue
Josemari Palomo, el gran Josemari. Siempre
que se le llamaba estaba disponible y dispuesto, un lujo y un placer. Se le
quería resistir la victoria en este torneo, pero finalmente llegó. ¿Cómo no iba
a llegar? ¡Eres único!
A este, le seguí un retorna, y menudo retornado.
Tiempo llevaba ya sin jugar al ajedrez, pero ni un poco del talento que tuvo se
le ha ido. Un intratable Alain Uriarte
no se unió solo para jugar, se unió para ganar al parecer. 100% de victorias lo
ensalzan como un gran jugador para tener en cuenta y a quien temer. ¡Gracias
por volver al ajedrez!
Nos temíamos que este año no íbamos a poder contar con
Marco Ezquerra. Su ajetreada agenda
le hace un poco complicado en ocasiones asistir a torneos. De todas formas,
sacó un rato para deleitarnos con su presencia y nos alegramos que en las
partidas que disputó lograse un pleno. ¡Así da gusto!
Patricia Arteche no podía faltar en este torneo, como en ninguno.
Siempre que puede, ahí está, jugándolo todo. Una pena no haberla visto mas
partidas, porque siempre un placer tenerla. No pasa nada, sabemos que lejos de
los tableros no se va a ir o eso esperamos; le quedan muchas partidas que
jugar, muchas victorias que firmar y grandes ratos que pasar. ¡A por el
siguiente torneo!
El más pequeño del equipo, Marco Tellaeche, no pudo extrenarse en esta ocasión en torneos
federados, pero no le quedan años ni nada. Ya vendrán más ocasiones, más
torneos, y desde luego más partidas. ¡Pasito a pasito!
El equipo lo cerraba otra joven joya que ha venido a
nosotros este año: Ouxiang Ivan Wang Xu.
Si hasta ahora he remarcado que había valientes en este equipo, este es la
valentía en persona. ¿Qué es nuevo y puede que pierda? Sí, ¿y? Imparable, implacable,
increíble. Jugó, vio que se podía perder y no pasaba nada, y siguió jugando. Sí
señor, esa es la actitud. No conoce el miedo. ¡Un placer haberte conocido!
En
definitiva, gran equipo lleno de grandes personitas. Con resultados que no
fueron malos a nivel colectivo, pero que sin duda si siguen por este camino
serán mejores. Un placer tener personas como vosotros en el club. ¡Seguid así!
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